Surgió como una manera de minimizar las lesiones de los practicantes y está basado en la armadura tradicional de los samurái; dada su antigüedad el bogu fue pasando por distintas evoluciones hasta convertirse en lo que se utiliza hoy en día.
El equipo consiste en una careta Men que protege la garganta, las clavículas el rostro y la mayor
parte de la cabeza. Esta construido de un gruesa capa de algodón emparedada entre dos
capaz de tela las cuales son bordadas con miles de puntadas para comprimir este
material hasta darle el grosor y dureza deseada, para cubrir el rostro esta una
rejilla a modo de caparazón, la cual hoy en día es de tungsteno, pero
anteriormente se usaba acero, hierro y hasta madera y bambú en su elaboración. Estas piezas se unen entre sí con sujetadores
de cuero curado.
El Do protege el
pecho y vientre y a diferencia de las demás partes de la armadura es completamente
solido; esta elaborado con partes de piel y domo que suele ser de plástico,
pero en los Do de mayor precio puede
ser de varillas de bambú labrado para darle esta forma, igual que se hacía en
la antigüedad. Es en esta pieza donde se permiten más libertades para la personalización,
pudiendo elegirse el color del domo y del bordado del Mune.
Los Kote son los
guanteletes que protegen las manos y antebrazos, igual que el men son hechos de
la misma “lona” rellena de algodón, pero además la mano esta acolchada con más algodón
extra para permitir flexibilidad para los dedos, y las palmas están cerradas
con un forro de piel bovina o de venado.
El Tare es el
protector de la cadera y las partes pajas, está hecho con el mismo material de
los Kote y del Men; está formado de 5 tablones, 3 grandes al frente y 2 más
pequeños atrás que permiten movilidad a las piernas, estas están unidas a una
faja que se ata a la altura del vientre.
Todas las piezas del Bogu
se sujetan al cuerpo usando Himo o
correas, las cuales se atan de maneras especificas; el practicante debe dominar
como ponerse y quitarse el Bogu con simpleza
y de manera ordenada, asi como asegurarse de mantenerlo en buen estado.
El precio del equipo puede variar en función del tamaño, la
calidad de sus piezas, los métodos de elaboración (ya sea a máquina o a mano) y
el número de puntadas usado en su fabricación, pudiendo ir desde $4,500 has $120,000
en algunos casos, pero en general está en un promedio de entre $5,000 a $7,000.
Normalmente se usa de un color azul marino como el uniforme
de Kendo, sin embargo existen en la actualidad otros colores en el mercado,
siendo uno de los más populares el Blanco, que es preferido por las mujeres y
algunos practicantes masculinos de alto rango. Además algunos fabricantes han
salido de lo acostumbrado al crear versiones en Negro y algunas otras versiones
más coloridas, que si bien no van en contra el reglamento, no son bien vistas
por toda la comunidad kendoka, ya que desentonan con el propósito del uniforme
y llaman demasiado la atención.
A continuación les dejamos una lista de nuestros proveedores
favoritos para adquirir este equipo:
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